sábado, 12 de septiembre de 2015

Capitulo XXX: El Espíritu de la Libertad

No podía dar crédito a lo que escuchaba, pues el mensaje que el CLER quería revelar haría tambalear los cimientos de nuestra historia. Destruyendo todo aquello en lo que hasta ese momento habíamos creído. Aunque ya nos exhortara en los inicios el mítico Buda a prestar atención exclusivamente a nuestra voz interior, al objeto de no errar en el camino. Declarando: “No creáis en nada simplemente porque lo diga la tradición, ni siquiera aunque muchas generaciones de personas nacidas en muchos lugares hayan creído en ello durante muchos siglos. No creáis en nada por el simple hecho de que muchos lo crean o finjan que lo creen. No creáis en nada sólo porque así lo hayan creído los sabios en otras épocas. No creáis en lo que vuestra propia imaginación os propone cayendo en la trampa de pensar que Dios os inspira. No creáis en lo que dicen las Sagradas Escrituras sólo porque ellas lo digan. No creáis a los sacerdotes ni a ningún otro ser humano. Creed únicamente en lo que vosotros mismos habéis experimentado, verificado y aceptado después de someterlo al dictamen de la razón y a la voz de la conciencia.” Sin duda, como heréticos seríamos estigmatizados. (Leer más

No hay comentarios:

Publicar un comentario